Ayer se publicó un nuevo informe PISA, como siempre con sonrojantes resultados para la educación española. Bueno, por lo que se escucha hoy en las noticias, sonrojo exclusivo para los ciudadanos, no para políticos o sindicatos de la educación.

Ellos no son responsables. La culpa es de los gobernantes anteriores, si hablan los gobernantes actuales. Y de los actuales, si son los anteriores los que analizan el informe.

Y si hablan los sindicatos de profesores, como en aquellos Expedientes X, la culpa siempre está ahí afuera: en los recortes, en las malas leyes, en los políticos, en la sociedad. Y si hablamos los padres, que alguna responsabilidad tendremos, cargaremos las culpas en la gestión de políticos y profesores…

Una de las razones del fracaso, no quiero simplificar un problema seguramente complejo, está en asociar la educación con la simple transmisión de conocimientos.

Ello se ve en la educación en general, desde la primaria hasta la universidad. Y se observa en la formación en la empresa. Se asume que, habiendo transmitido el modelo tal de liderazgo al grupo de mandos,  éstos automáticamente van a cambiar sus formas de entender, comunicarse u orientar a su equipo.

¿Educar / formar = transmitir conocimientos?

¿Por qué se asume la anterior igualdad? Porque es más fácil.

Transmitir conocimientos es reproducir ideas. En los institutos secundarios españoles abundan profesores que usan la proyección de atiborradas presentaciones PowerPoint como Telepromter, ese aparato que usan los presentadores de televisión para leer su mensaje. Y en eso consiste su trabajo educativo: repetir a los sufridos y apáticos estudiantes los datos obtenidos en otro lugar.

Tres factores necesarios

Informe PISA

Desarrollar habilidades es mucho más difícil, implica la existencia de al menos estos 3 elementos:

1. El conocimiento

La persona debe saber cómo hacerlo. Pero hay más.

2. La motivación de cambio

La persona debe querer realmente poner en práctica aquel conocimiento, introduciendo un cambio en su forma actual de comportarse. Y esto no siempre es evidente. Cambiar no es fácil y lo más fácil es seguir haciéndolo de la misma manera.

curso formacion de formadores

Se presenta aquí un triple desafío para el formador:

  • Conseguir que el participante acepte que es mejorable.
  • Demostrarle el beneficio que obtendrá si modifica lo que hace o cómo lo hace.
  • Convencerle de que él puede realmente cambiar; de que aunque no lo haga hoy así, él puede hacerlo mejor.

3. La práctica

La incorporación de una habilidad implica ensayar, auto-analizarme, escuchar la crítica de terceros, analizar cómo lo hacen otros… hasta tomar consciencia de mi comportamiento y proponerme cambios.

Y volver a practicar, idealmente en un entorno seguro, hasta conseguir hacerlo diferente y obteniendo resultados diferentes.

motivacion PISADos factores influyen aquí:

  • Tiempo invertido. Una tendencia observada en el mercado de la formación a empresas es el acortamiento de la duración de las sesiones. En los últimos años los formadores recibimos pedidos del tipo: Como tienen problemas de tiempo, sólo puedo sacarles de su puesto durante 4 horas… es el tiempo que tienes para enseñarles a usar mejor su tiempo y a ser más efectivos. ¡Pero quiero algo práctico, eh!
  • Seguimiento post formación que continúe el proceso iniciado en el aula e impulse la transferencia al puesto de trabajo.

Conclusión

El reto para los formadores de empresa y educadores es no quedarnos sólo en la primera fase: la simple, fácil, pero ineficiente transmisión de conocimientos; apuntar al cambio de motivaciones, actitudes y comportamientos; y utilizar la metodología correcta. Que no siempre es la más sencilla, barata y rápida.

Me pregunto ¿qué nos diría Mr. Pisa si analizara la formación en la empresa española y la comparara con la realizada en Finlandia o Singapur?    

Viñetas: Idigoras y Pachi | Manel Fontdevila